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La experiencia con el cancer, por Leticia Mejia

Mi temprano encuentro con el Cáncer - Parte I

Por Letty Mejía
DESCUBRÍ QUE VIVIR CON CÁNCER NO ES ABURRIDO...

Confieso que mientras escribo este post me pongo a pensar "pero ¿y de verdad todo esto está pasando?" y es que tomando en cuenta que en realidad ninguna muchacha de 20 años tiene en sus planes pasarse los siguientes tres años de su vida tomando quimioterapias, teniendo menopausia precoz y bebiendo jugos para las defensas, es normal que me haga la pregunta.

El cuento es más o menos así…
Unos cuatro meses antes de cumplir mis 21 añitos, después de muchas pruebas médicas, citas con oncólogos, dudas e incertidumbre, llegué a donde un doctor que de la nada me dijo que tenía que operarme y hacerme una biopsia. Me pareció una locura porque era la primera consulta y pensé "cónchale, en la primera cita y ya me quiere llevar al 'quirófano', ¡esta relación si que va rápido!" aunque de todos modos le permití hacerlo.

Fue miércoles que me dijo de la biopsia, el viernes hicimos el procedimiento y el lunes espantosamente rápido teníamos el diagnostico: CANCER. Sí, yo se que lo normal es que arme una novela a partir de aquí, pero les diré que NO, porque ha sido más que eso, más que simple drama, ha sido una experiencia que aunque no quisiera repetir no la cambio por nada en este mundo.

No, estoy loca, soy fiel creyente de que la película será de terror, drama o suspenso, dependiendo de cómo decidamos enfrentar las cosas. Esta enfermedad te llena de lecciones, recuerdo que una amiga sobreviviente de cáncer llamada Denisse Santos (a quien adoro) un día me dijo "lo más difícil de ser joven y tener cáncer es que la vida no te ha preparado para tolerar ver tu mundo cambiar en un minuto y de forma tan radical" y tiene toda la razón, un día me encontraba con problemas cotidianos: cuentas por pagar, trabajo, compromisos de diferentes índoles y de repente me encuentraba en una lucha por mi vida, por mantenerme en este mundo, lo cual es realmente desconcertante.

El asunto es que por el mismo hecho de que nos vemos obligados a emprender este viaje de lucha recibimos como primera lección en el camino: VALORAR LA VIDA, querernos más y apreciar todo lo bueno (que a lo mejor hasta ignorábamos). Desde el día del diagnóstico me detengo a ver los atardeceres, a contemplar la luna, cierro los ojos para oler el salitre cuando voy a la playa... En fin disfruto más las cosas, porque este tipo de situaciones te enseñan a valorar lo que te rodea.

También he aprendido a no alarmarme POR NADA, imagínense ustedes, ¿qué puede ser un "problema" cuando vivo con un verdadero problema y aún así estoy aquí? Esa es otra lección, aprendí que todo en lo absoluto tiene solución y que más que problemas lo que se nos presentan en el día a día son retos.

Podría enumerar un montón de lecciones: coraje, fortalecimiento de la fé, aceptación de la voluntad de Dios, esperanza, desapego, en fin, es como que la misma enfermedad siempre y cuando decides enfrentarla viene acompañada de todo lo que necesitas para vencerla.

Al día de hoy han pasado tres años de que estoy en tratamiento, en ese proceso he perdido el cabello, un seno, mi antiguo novio, buenas oportunidades de empleo y falsos amigos, pero ¿quien quiere falsos amigos cerca cuando se tiene gente tan buena alrededor? Con 21 años me toco enfrentar la tragedia de una mastectomía hecho con el cual decidí bromear diciendo "bueno, ahora si decido broncearme en topless solo estaré cometiendo medio pecado... ¡como sólo tengo un seno!" Jajaja si si si, soy cruel conmigo misma, pero lo prefiero a que alguien más lo sea.

El cabello lo he perdido ya dos veces, lo cual no es para nada molesto para mí, salgo a donde sea con mi cabeza al aire, nunca me he atrevido a usar ni pelucas, ni sombreros, ni bufandas, eso no se hizo para mi, amo la libertad que se siente con la cabeza raspada al punto que he llegado a considerar dejarlo bien corto todo el tiempo.

¿ Mi peso? Que decirles, las jaboneras de mi cuello hace tiempo que no se ven, pero ¡pregúntenme si me importa! Soy feliz así, bailo, corro, voy a la playa y sí, me pongo mi traje de baño de dos piezas, ¡soy una gordita feliz!

Hay detalles específicos que me gustaría contarles más adelante, mientras sepan que hay es vital que si algunos de los que están leyendo son pacientes de cáncer deben dejarse rodear por gente que les quiera y les cuide, si por el contrario quien me lee tiene a un pariente o amigo con cáncer, pues tiene la responsabilidad de darle amor y apoyo a esa persona y POR FAVOR ténganles PACIENCIA
Básicamente quiero que se queden con la clara idea de que vivir con cáncer no es trágico si no queremos que lo sea, si se empeñan en decirme aquello de que "no todo es color de rosas" pues yo me empeño en colorearlo yo misma…


En Mi temprano encuentro con el Cáncer - Parte II te traigo la segunda parte de este artículo, que entre otras cosas tiene recomendaciones creo deben ser tomadas en cuenta tanto por pacientes con cáncer como por sus seres queridos, así que ¡continúa la lectura!


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