Hablemos de moda sostenible y, para hacerlo, partamos por establecer un punto: “la pieza más sostenible es aquella que ya se ha usado”, según esta interesante idea las pacas (amadas por muchos y odiadas por otros), además de económicas, son mucho más ecológicas o amigables con el medio ambiente que la ropa de primera mano.
Antes de continuar recordemos que la industria de la moda es, actualmente, la segunda más contaminante del mundo. De hecho, según información compartida por la Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo, la afición por las prendas de vestir es responsable del 20% del desperdicio total de agua a nivel global. Si te preguntas cómo es esto posible, la respuesta es simple: nada más para hacer unos jeans son necesarios 7,500 litros de agua, lo cual es equivalente a la cantidad de este preciado líquido que bebe una persona promedio en siete años… Como si esto no fuera suficiente, más de 50% de los residuos de consumo terminan en los vertederos y menos del 1% de la ropa se recicla, llegando a enterrarse o quemarse cada segundo el equivalente a un camión de basura, repleto de prendas de vestir.
Entonces, ¿qué hace que las pacas sean ecológicas?
Primero el que independientemente de su procedencia, al alargar la vida de las piezas de vestir se está evitando que las mismas terminen parando en los basureros. Adicionalmente, en cada compra de pacas se reduce el consumo de prendas nuevas, las cuales vienen cargadas de altísimos niveles de contaminación sobre todo dentro de los rangos de precio más económicos por la predominancia de tejidos sintéticos.
Segundo, porque dentro del movimiento de “Slow Fashion” que se opone a la moda rápida, está tomando cada vez más fuerza el “Upcycle” una tendencia que se basa no solo en reciclar las piezas de segunda mano, sino en hacer que tras su intervención creativa estas obtengan un mayor valor tanto comercial como artístico y que de aquello que fue desecho surjan creaciones únicas.
En la República Dominicana cada vez son más los diseñadores que apuestan a la moda sostenible, al igual que los espacios que exaltan no solo las piezas de segunda mano, sino el ruso y la re-creación de aquello que, de otra forma, hubiera terminado en la basura. Ellos provienen de distintas escuelas y, en próximos artículos, te estaremos presentando algunas de sus creaciones. Mientras tanto, te invitamos a que pienses bien el impacto ambiental de tus compras, para que no solo apuestes a un tipo de consumo más consciente, sino que trates de alargar al máximo la vida útil de tus prendas, valiéndote de la creatividad propia o de las diversas y talentosas propuestas disponibles en el mercado tanto local como internacional.
Dinos en los comentarios, ¿te atreverías a entrar en esta tendencia del mundo de la moda?
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Si quieres leer más sobre este popular modelo de negocio y sus implicaciones, visita ¿Sabes qué hay detrás de la ropa de paca? y, para conocer una de las iniciativas más destacadas en materia de moda sostenible, visita nuestro artículo: Paca chic, crónicas de un taller de moda sostenible.
Artículo originalmente creado por Umami.do para remolacha.net. Publicado bajo el título: Ropa de paca, ecológica y socialmente compleja.